top of page

Al estar en Marina D'or y con ganas de entrar en el jardín encantado,

en mi cabeza esto se encontró:

         Por el horizonte te vi aparecer mientras yo iba llegando al final del trayecto. Estabas rodeado de miles de flores y seres encantadores.

          Esas criaturas estaban contemplándote y aprendiendo de tus sabios consejos e historias acorde a tu edad milenaria.

     Tus leyendas llenas de magia hacen que nos adentremos a tu maravilloso mundo que esta repleto de emocionantes espectáculos. Donde iré recorriendo el camino entre fuentes, cascadas y estanques para encontrarme con preciosos personajes mitológicos. Todo ese universo que me fascina y me hace seguir a llevarme a leyendas de la era medieval.

La imagen de la derecha esto es lo que inspiro:

                        Estaba tan cansada que decidí ir a la zona de cafetería de la empresa para despejarme del duro día de trabajo. Todavía me quedaban dos horas para terminar la jornada y ya mis ojos me pesaban. De camino me topé con un compañero que venía de allí. Al llegar nadie estaba tomando un tentempié, yo sólo estaría acompañada de la taza de café en la mesa. El líquido negro fue cayendo en la taza y el humo del calor de la bebida fue topándose por mi nariz que estaba a punto de coger un resfriado. Eso me producía un malestar en todo el cuerpo, pero necesitaba la cafeína para poder reanimarme y poder acabar mejor los montones de folios sobre mi escritorio.

                      Otros días coincidíamos muchos compañeros, pero hoy fui más tarde. Detrás de esa taza que era mi única compañía, estaba la cafetera de capsulas que cambiaron hace poco tiempo. Parecía borrosa al mirarla con mis ojos cansados. Estaban muy cargados y hasta el vapor de su calor, me molestaba.  Pero la cafeína ya estaba surgiendo efecto y empezaba a reanimarme, aunque no lo que yo necesitaba. Al terminar de beberlo, fui a limpiar la taza en el fregadero, para luego encaminarme hacía mi lugar de trabajo.

El  Invierno  se  acerca

            El invierno se acerca y la fría brisa se adentra en tu cuerpo, sin necesidad que te escapes de ella. Sus garras van entrando poco a poco, acompañándote en su duro recorrido, donde apenas te dejara progresar hacía adelante. 
        Sin saber como lograrlo irás vagando en el interior de su aparición para acostumbrándote a todo lo que se avecinará.   

         Donde podrá ser peligroso si te encuentras peligros o seres espeluznantes. Donde podrá ser apaciguante si logras protegerte entre sus montañas. Donde tus huellas se quedaran plasmadas en la nieve de su trayecto. 

                Si esa brisa es grande no podrás ver más allá del cielo, no podrás ver si el invierno será largo o acabará cuando termines con su profecía.

             Mirando en la lejanía del cielo, el color amarillo de las nubes quieren alcanzar las ramas de este árbol desnudo, para tejerle un precioso abrigo y así arreglarse para el baile del amanecer.

           

            Muy despacio se irán meciendo para componer una danza, que se irá formando al son del aire de la madre naturaleza. 

         

         Esa escena acompañará mi vista hacía la lejanía y me hará alojarme junto a las montañas para protegerme del ambiente que se avecinará al día siguiente.

          Aquella noche no muy calmada de nubes, las gotas de lluvia en la ventana comenzaban a deslizarse. Mi mirada divisa una fuerte tormenta, mientras aquí estoy en la habitación con la única compañía de una vela. Aquí noto que estoy preparada para afrontar todo que me llegue, para vencer este temporal.

         Notando el incierto mirar ausente de tus profundos ojos negros, que poco a poco se esta alejando de esta noche frívola.

        Atrás tu ruido se enreda entre mis manos, sin conseguir traspasar mi piel.

         Los días van pasando y vamos a vencer este temporal, nunca más resquebrajarás nuestra piel.

 

         Poco a poco estamos pasando el tormento, fuera ya del dolor...

 

     Ahora nos toca sentir la presencia de los que pudieron luchar para quedarse, sintiendo como esta sonando la armonía triunfal, reencontrando la fuerza para seguir adelante.

      Iremos tapándote, lograremos renacer en nuestro jardín, seremos el aire limpio, la tierra firme, el agua cristalina..., lo necesario para vencerte.

dark-1850684_960_720.webp

21-04-2020

bottom of page